Salgo a las siete y veinticinco de la mañana, es la hora del tren y me dirijo a Madrid, tan sólo dos horas y media más tarde llego a la estación de Atocha, cojo el metro que me lleva a Chamartín donde espero la llegada del tren que me llevará a Ávila., A las once y cuarto de la mañana, sale y llego 
a la una menos veinte, me dirijo a la estación de autobuses donde saco el billete hasta La Adrada, destino final. 
Podría haber hecho el trayecto más corto, tal y como hice a la vuelta, directamente de Madrid a La Adrada pues también hay combinación pero la premura del viaje no me permitió indagar tal posibilidad.
Tan sólo tres días en los que tuve todo el tiempo del mundo para recrearme con el paisaje y las buenas gentes del lugar, La Adrada es una población de Castilla – León enclavada en el Valle del Tiétar lugar de bellos rincones por su exuberante vegetación y rodeada de altas montañas, la Sierra de Gredos extiende su laderas hasta los pies mismos de la Villa. Grandes bosques de pinos y de forma sobresaliente e icono de la zona es
el pino del “Aprisquillo” árbol de gran tamaño que ha visto pasar el tiempo los fríos inviernos, y los veranos ardientes, sus raíces toman agua del reguero se alimenta y va creciendo. De verdad que es una maravilla para conocer y descansar bajo su sombra.
Villa de La Adrada, cesión que hizo el Concejo de Ávila al Concejo de La Adrada para que colonice la zona denominada “Dehesa de la Avellaneda”. Tras la reconquista, la zona sur de Gredos, fue repoblada, bajo la forma de repoblación concejil. De dicha repoblación se encarga Ávila. Los nuevos colonos procedían lógicamente de la zona cristiana, gallegos, toreses, burgaleses, etc.
En éste mural podéis continuar leyendo la historia de
La Adrada, es muy interesante al igual que éste lugar.
Algunas imágenes de ésta población que de seguro os gustarán, algunas de las cuales las hice con el móvil y no por ello son menos valiosas, hay algunas que me sorprendieron por la calidad. Las cámaras de los móviles las hacen cada vez con más pixeles y éstos a la vez están más perfeccionados casi tanto como cualquier máquina de fotos compacta. A continuación os presento la población de La Adrada en fotos:
La Plaza Mayor donde está ubicado el Ayuntamiento.
El Hogar del Pensionista
Vistas de la Plaza Mayor y centro de La Adrada.
Ascenso al Castillo, recorrido corto pero que está lleno de sabor y color de pueblo.
Por la calle de escalones que sigue la fachada del Ayuntamiento empieza la subida, pasamos por unas casas de emparrados que sirven de sombrilla a las puertas de las casas.
En la calle de los Talleres, una exposición de arte decora la fachada, acompañada de un extraño individuo que vigila la puerta de la casa.
Ya a las puertas del promontorio donde se alza el castillo, este pequeño parque donde podemos contemplar buenas vistas panorámicas.
El Castillo con la explicación de la historia de la fortificación.
El acceso, pasarela con sus fuertes cadenas.
Entre las piedras encontré ésta original declaración de amor.
Y desde el promontorio, el paisaje.
De nuevo vuelvo la vista atrás, y me gusta lo que veo.
Como agarrada a las rocas las viviendas suben a lo más alto.
La Avenida de Castilla y León carretera de acceso y paso a otras poblaciones, también donde se ubica la histórica Iglesia.
Iglesia y Parroquia El Salvador.
Año 1.792 , sin palabras.
la antigüedad se palpa en las fachadas del pueblo.
Seguiré con más fotos y una segunda parte, ¡ah! por cierto ahora que me marcho de la Adrada es primeros de Septiembre y comienzan las fiestas del “Salvador”, ya no me pasará más no faltaré el próximo año. Si os gusta la naturaleza y el sabor a pueblo no perderos venir por aquí. Un saludo a todos.
a la una menos veinte, me dirijo a la estación de autobuses donde saco el billete hasta La Adrada, destino final. 
Podría haber hecho el trayecto más corto, tal y como hice a la vuelta, directamente de Madrid a La Adrada pues también hay combinación pero la premura del viaje no me permitió indagar tal posibilidad.
Tan sólo tres días en los que tuve todo el tiempo del mundo para recrearme con el paisaje y las buenas gentes del lugar, La Adrada es una población de Castilla – León enclavada en el Valle del Tiétar lugar de bellos rincones por su exuberante vegetación y rodeada de altas montañas, la Sierra de Gredos extiende su laderas hasta los pies mismos de la Villa. Grandes bosques de pinos y de forma sobresaliente e icono de la zona es
el pino del “Aprisquillo” árbol de gran tamaño que ha visto pasar el tiempo los fríos inviernos, y los veranos ardientes, sus raíces toman agua del reguero se alimenta y va creciendo. De verdad que es una maravilla para conocer y descansar bajo su sombra.Villa de La Adrada, cesión que hizo el Concejo de Ávila al Concejo de La Adrada para que colonice la zona denominada “Dehesa de la Avellaneda”. Tras la reconquista, la zona sur de Gredos, fue repoblada, bajo la forma de repoblación concejil. De dicha repoblación se encarga Ávila. Los nuevos colonos procedían lógicamente de la zona cristiana, gallegos, toreses, burgaleses, etc.
En éste mural podéis continuar leyendo la historia de
La Adrada, es muy interesante al igual que éste lugar. Algunas imágenes de ésta población que de seguro os gustarán, algunas de las cuales las hice con el móvil y no por ello son menos valiosas, hay algunas que me sorprendieron por la calidad. Las cámaras de los móviles las hacen cada vez con más pixeles y éstos a la vez están más perfeccionados casi tanto como cualquier máquina de fotos compacta. A continuación os presento la población de La Adrada en fotos:
La Plaza Mayor donde está ubicado el Ayuntamiento.
El Hogar del Pensionista
Vistas de la Plaza Mayor y centro de La Adrada.
Ascenso al Castillo, recorrido corto pero que está lleno de sabor y color de pueblo.
Por la calle de escalones que sigue la fachada del Ayuntamiento empieza la subida, pasamos por unas casas de emparrados que sirven de sombrilla a las puertas de las casas.
En la calle de los Talleres, una exposición de arte decora la fachada, acompañada de un extraño individuo que vigila la puerta de la casa.
Ya a las puertas del promontorio donde se alza el castillo, este pequeño parque donde podemos contemplar buenas vistas panorámicas.
El Castillo con la explicación de la historia de la fortificación.
El acceso, pasarela con sus fuertes cadenas. 
Entre las piedras encontré ésta original declaración de amor.Y desde el promontorio, el paisaje.
De nuevo vuelvo la vista atrás, y me gusta lo que veo.
Como agarrada a las rocas las viviendas suben a lo más alto. 
La Avenida de Castilla y León carretera de acceso y paso a otras poblaciones, también donde se ubica la histórica Iglesia.
Iglesia y Parroquia El Salvador.
Año 1.792 , sin palabras.
la antigüedad se palpa en las fachadas del pueblo.Seguiré con más fotos y una segunda parte, ¡ah! por cierto ahora que me marcho de la Adrada es primeros de Septiembre y comienzan las fiestas del “Salvador”, ya no me pasará más no faltaré el próximo año. Si os gusta la naturaleza y el sabor a pueblo no perderos venir por aquí. Un saludo a todos.
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